REACTIVABILIDAD DEL CARBÓN ACTIVADO
La posibilidad de reactivar un carbón activado saturado está solo parcialmente ligada a las características del producto fresco. En muchos casos, si no en la mayoría, la reactivación está relacionada con las condiciones del proceso en las que el carbón se encuentra operando.
De hecho, un carbón activado como tal puede definirse como reactivable o no reactivable esencialmente desde el punto de vista de la conveniencia económica.
Para este tratamiento, de hecho, los carbones activados susceptibles a priori de altas pérdidas debido a las tensiones de reactivación (y entre estos, la manipulación juega un papel importante en muchos casos) pueden resultar menos convenientes que otros para el tratamiento térmico.
Estos factores no son detectables por parámetros analíticos particulares, pero solo pueden deducirse de pruebas piloto.
El caso de la reactivación del carbón activado utilizado para la recuperación de solventes (tratamiento del aire) es típico.
Normalmente, en este caso, se utilizan productos con altos niveles de activación y, por lo tanto, ya están particularmente "estresados" desde el punto de vista físico durante la producción, que resisten mal los tratamientos térmicos posteriores.
También ocurre con frecuencia que la distribución de los poros se modifica significativamente después de una o más reactivaciones y que, en el límite, estos colapsan, reduciendo significativamente el efecto de la propia reactivación.
El entorno en el que opera reviste una importancia significativa para la reactividad de un carbón activado.
Para limitarnos al tratamiento del agua, se puede afirmar que, por ejemplo, las aguas muy salinas tienden a incrementar significativamente el contenido de cenizas, reduciendo consecuentemente el grado de reactivación.
En algunos casos, el carbón ya no es reutilizable después de un solo tratamiento térmico.
Otro caso está representado por compuestos de alto peso molecular del tipo polifenol que, en condiciones normales de tratamiento, tienden a dar compuestos de carbono que no pueden eliminarse de la superficie activa.
En el sector del tratamiento del aire, por ejemplo, las reactivaciones del carbón saturado con compuestos fácilmente polimerizables son problemáticas. En algunos de estos casos la reactivación está totalmente comprometida.
Por tanto, para una correcta valoración de la conveniencia de realizar una reactivación de carbón saturado, es de suma importancia tener en cuenta las características del fluido tratado y por tanto proceder a un análisis del producto a reactivar. La investigación debe ser particularmente exhaustiva en el caso de aguas residuales de composición dudosa o compleja.
